Artero Ataque a los Sindicatos
Como todos los compañeros/as habrán notado, de la
conferencia de prensa que diera el Ministro de Economía Kiciloff el lunes desde
las 13 horas, a los efectos de anunciar algunas modificaciones en el mal
llamado “impuesto a las ganancias” para la cuarta categoría, en una parte de su
larga alocución, a los fines de fundamentar que el gobierno está haciendo un
gran sacrificio en sus recaudaciones, no se le ocurrió nada mejor que comparar
unas cifras promedio de cuanto se le retiene a los trabajadores de algunas
actividades alcanzados por este impuesto, comparándolo con lo que esos
trabajadores abonan por cuota sindical.
En ese sentido, se atrevió a explicitar que con la
cuota sindical los trabajadores “reciben turismo y una vez por año un
guardapolvo”….y no conforme con haber expresado esta injusta y maladada
comparación, vuelve mas adelante a reiterarla, con lo cual ni siquiera puede decirse que haya sido un lapsus linguae, ni que lo haya traicionado el
subconciente, sino que trasunta una
posición ideológica que en minoría compone el llamado progresismo. Niegan de ex profeso desde este sector, la
razón de ser desde sus orígenes del sindicalismo, como herramienta de
organización y lucha representativa de los trabajadores; Luego vinieron los
frutos de haber comenzado a conseguir los primeros Convenios Colectivos de
Trabajo y se fueron cimentando los derechos de los asalariados, para pasar a
ser parte integrante de diversas leyes del ámbito laboral. Posteriormente
en otras etapas se fueron consiguiendo los derechos sociales y ello llevo a que
los sindicatos tomaran a su cargo y responsabilidad, la prestación de los
servicios médicos-asistenciales y la prestación de beneficios de Turismo entre
otras en favor de las familias de los trabajadores.
Nadie podrá decir que nosotros estamos en el sector
sindical de la oposición cerrada, sino que por el contrario hemos estado
apoyando y respaldando diversas políticas del gobierno nacional, entendiendo
que era lo mejor para nuestro país y para combatir los males heredados del
neoliberalismo que campeara desde mediados de la década del 70 hasta el 2002.
Dadas las repercusiones negativas y de repudio que han
producido las declaraciones del Sr. Ministro antes apuntadas y en conocimiento
que representa su propia posición y de su grupo intelectual, hemos visto una
primera reacción suscripta por uno de los periodistas que forman parte del
oficialismo, que por ser “astilla del mismo palo” creemos que es de utilidad su
reproducción y difusión, para los cual se adjunta. Vaya el repudio y aclaración
pertinente de la FATIDA.
Buenos Aires 6 de mayo de 2015
Por el Secretariado Nacional de la FATIDA
Julio F. Sánchez Hugo Dante Ortiz Enrique Marano
Tesorero Sec. de Prensa Secretario General
(El texto que se adjunta abajo salió hoy en la página
web de la “Agrupación Paco Urondo”.)
Los anuncios sobre ganancias realizados por el Ministro de Economía de la
Nación se vieron teñidos por un discurso anti - sindical que contribuye a la
estigmatización de las organizaciones gremiales, su militancia y cuadros
dirigentes. ¿Cuál es la importancia de la cuota sindical para los trabajadores?
Por Nahuel Placanica
A pesar de las sucesivas desmentidas de funcionarios del gobierno nacional
sobre eventuales cambios referidos al impuesto a las ganancias, el Ministro de
Economía, Axel Kiciloff, anunció una reducción del tributo para los salarios
menores a 25 mil pesos.
La presentación de la medida, que no representa una solución de fondo pero
si un importante alivio para muchos dirigentes gremiales y sus bases de
representación, se vio acompañada por un discurso anti-sindical que sólo
contribuye a la estigmatización de las organizaciones gremiales, su militancia
y cuadros dirigentes.
La relativización del reclamo de ganancias, ubicándolo como demanda
específica de “la crema de la clase trabajadora”, no solo ha sido un latiguillo
para ningunear un reclamo justo sino una forma de correr el eje de discusión
sobre rentabilidades extraordinarias exentas de gravámenes similares.
La alocución del compañero Ministro de Economía retomó esta senda
discursiva, agregándole una porción de relato anti-sindical latente en sendos
cuadros de gestión y políticos que comparten el amplio espectro kirchnerista.
Sus declaraciones críticas sobre la cuota sindical golpean sobre unos de
los puntales del movimiento sindical argentino: su autonomía financiera. Esta
herramienta hace a la constitución de estructuras gremiales fuertes: en el
marco de un modelo de relaciones laborales que favorece una positiva
concentración de la representación, equilibra la correlación de fuerzas a favor
de los trabajadores en la disputa capital – trabajo.
Esos recursos no hacen solo al sostenimiento de la estructura
administrativa de los sindicatos. También, son destinados para múltiples
prestaciones en materia de salud, esparcimiento, vivienda, formación sindical y
profesional e incluso comunicación e investigación en experiencias más
avanzadas.
Asimismo, los recursos administrados por las organizaciones resultan claves
a la hora de sostener medidas de fuerza, fondos de huelga, garantizar presencia
en acciones gremiales y costear los costos de acompañamiento logístico,
económico y legal de los compañeros en conflicto, estén o no afiliados.
El exabrupto del compañero ministro no reparó en estas cuestiones y dejó un
magro sabor sobre el anuncio de una medida positiva en el contexto actual.
Estos “destratos” sólo tensan la relación con el campo sindical y nublan el
panorama sobre quiénes son los verdaderos actores con quienes disputar, incluso
a través del discurso, la distribución de la riqueza.
¿Cómo se recauda la cuota sindical?
En términos generales, podemos diferenciar dos formas de recaudación. Por
un lado, los gremios recaudan por medio del convenio colectivo: el aporte
solidario de todos los trabajadores del sector suele rondar el 1%. (o 2%)
La premisa que rige este mecanismo se basa en que todos los trabajadores se
benefician de las conquistas del sindicato, por ejemplo, aumentos
salariales.