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domingo, 9 de agosto de 2009

42º CONGRESO ORDINARIO Y PLENARIO DE SECRETARIOS GENERALES DE LA FATIDA

El jueves 6 de agosto se desarrolló tal como estaba previsto el Plenario de Secretarios Generales, antes de desarrollarse el mismo se entonaron las estrofas del Himno Nacional Argentino en el patio de entrada de nuestra colonia, y el izamiento de la bandera que estuvo a cargo de la compañera Secretaria General de La Rioja Cristina Molina Miranday y el compañero Rodolfo Dominguez de Jujuy.

En el Plenario se brindò un amplio informe sobre la Obra Social como primer punto, seguidamente las Filiales expusieron su informe de la aplicación de convenio, cumplimento de las escalas, situación de la CGT y otras consideraciones respecto a la situación de cada provincia.

Es de destacar la presencia luego del tratamiento del primero punto del eximio abogado laboralista Lucio Garzón Maceda, quien "cautivo" a los compañeros y compañeras delegadas con su esclarecedora disertación sobre la situación actual de los sindicatos, su historia, y el futuro de los mismos. La charla de casi una hora y media del Dr. Garzòn Maceda fue realmente sin desperdicio y todos los compañeros presentes se mostraron complacidos de haber podido escuchar y motivarse ante el pensamiento simple y sencillo del disertante.

Finalmente se discutio sobre la situación actual del movimiento obrero y la posición del gremio gràfico del interior del paìs en relación con el gobierno. En tal sentido se emitio un comunicado que transcribimos a continuación:

LOS GRAFICOS ESTAMOS CON LA
PROFUNDIZACION DEL MODELO

Pasó el acto electoral y las piezas y actores de la política argentina se han venido reacomodando, como si lo que estuviera en juego fuese una simple partida de ajedrez.
Si algunos desprevenidos lo habían tomado así, ahora podrán tomar conciencia que la disputa no era por cuestiones intrascendentes, sino todo lo contrario: los “vencedores” de lo que cierta prensa dio en llamar el “28J”, parafraseando a los apocalípticos que narraron verdaderas tragedias como la caída de las Torres Gemelas o el atentado de Atocha, comienzan ahora a mostrar sus verdaderas intenciones, que consisten simplemente en regresar a la política que predominó en los años 90.
Fue, vale la pena recordarlo, una elección de medio tiempo en la que sólo estaba en juego la futura composición del Parlamento Nacional; no se elegía otro gobierno ni se votaba otro programa político.
“Ayudó” a que se la tomara como la oposición lo planteó, el error de los candidatos del PJ en querer transformar la misma en un plebiscito de la gestión gubernamental. Y esto, fogoneado al máximo por una prensa interesada en un revés del gobierno, porque no quiere perder la enorme concentración en pocas manos del manejo de la comunicación social. Y todos sabemos lo que esto significa.
Hemos asistido prácticamente a una suerte de golpe mediático, que lejos de parar, ha profundizado la presión para obtener sus fines. Y entonces todo viene bien: el conflicto del campo, la falta de diálogo, las crisis porcina y financiera que nos vinieron de afuera, la permanencia de Moreno, los índices del INDEC, la desigualdad social, la caída del superávit, la crisis en la CGT, etc., etc., etc.
Le dan a ello un espacio enorme y cotidiano. El que no le dieron a las declaraciones del jefe de gobierno porteño y a De Narváez cuando expresaron que había que volver a los años 90; que había que abolir el modelo. El que tampoco le dieron a De Angeli, quien casi pegadito a los dichos anteriores, expresó que “hay que juntar a los empleados en las estancias, subirlos a la camioneta y decirles a quién hay que votar”.
A la cabeza de este enorme operativo de prensa, están los grandes medios capitalinos con sus diarios y emisoras de radio y televisión, jugando a fondo tras el desembozado intento de debilitar al gobierno.


QUIEREN VOLVER A LOS AÑOS 90


Hagamos un poco de memoria: los años del neoliberalismo a ultranza que soportó nuestro país, estuvieron caracterizados por la entrega del patrimonio nacional y la cesión de recursos estratégicos como ningún otro país hubo de vivir. El sometimiento a las recetas del Fondo Monetario Internacional, nos quitaron independencia política y económica. Los gobernantes de turno, profesaron y cultivaron las “relaciones carnales”. Así nos fue.
La entrega del petróleo, de la energía hoy por hoy en manos de empresas extranjeras, de importantes empresas privadas de nuestro país vendidas a capitales internacionales (alimentarias, producción de cemento, metalúrgicas, telefonía, desaparición del transporte ferroviario para personas, la aerolínea de bandera y la producción de aviones, etc.), fueron “pinceladas” de una gestión de gobierno que privatizó todo lo que pudo o de aquello que le interesaba al capital internacional.
Casi nada quedó propiedad del país, excepto un enorme endeudamiento interno y externo. El sistema previsional fue a parar a manos de empresas privadas con fines de lucro, al igual que la prevención de la salud en el ámbito de trabajo. Nacieron las ART y con ello fueron creciendo los accidentes de trabajo y muriendo los derechos de los trabajadores.
Las prepagas inundaron el “mercado” de la salud respaldadas por cambios legislativos que les abrieron las puertas para infiltrarse “legalmente” en un espacio tentador para quienes buscaban hacer dinero, no para llevar salud y menos aún prevención, a los sufridos trabajadores y sus familiares a cargo.
En el campo laboral tuvimos una andanada de cambios regresivos que mutilaron leyes fundamentales para los trabajadores. Desde la antigua 14.250 posibilitando la negociación colectiva reducida al ámbito de la empresa, hasta las reiteradas disminuciones del despido para abaratar las cesantías y poder cambiar mano de obra barata por aquella que además de especializada, era sindicalizada.
El desempleo creció a porcentajes antes desconocidos en la Argentina. En poco tiempo de entrar en vigencia la convertibilidad, de un 4,5% creció hasta el 18% aterrador que generó un ejército de desocupados e instaló una suerte de miedo colectivo que llevó a quienes tenían empleo, a bajar la cabeza y olvidar sus reclamos por temor a quedar en la calle.
El movimiento obrero, no en su totalidad, protagonizó desde la creación del MTA, una gesta reivindicativa que fue sumando adhesiones a medida que aumentaba la presión del neoliberalismo. El MTA fue un claro ejemplo de la resistencia a las políticas de aquellos años que tanto daño le hicieron al país y su gente.
Los reclamos del MTA fueron desoídos y reprimidos: los gobiernos de ese tiempo no querían atender los mismos, y menos aún dialogar, aunque la prensa de estos días parece haber olvidado esos hechos que acompañó con un silencio cómplice, como varios “comunicadores sociales” lo hicieran durante la dictadura.
En síntesis, el modelo de los 90, estuvo diseñado para unos pocos, para aquellos que hoy añoran lo que les regalaron en esa década y que ahora pretenden recuperar a costa de la inmensa mayoría del pueblo argentino.


IRRUMPE UN NUEVO MODELO


Luego de la histórica crisis que debió atravesar nuestro país, y ante el fracaso del discurso único prevaleciente en esos años, las cosas comenzaron a cambiar producto de variarse radicalmente los objetivos, concibiéndose otro proyecto de país.
Primero fue el tándem Duhalde-Lavagna. Luego Kirchner-Lavagna y quienes le siguieron, los que adoptaron una política nacional y popular que privilegió un modelo industrialista, poniendo el acento en la preservación de lo nacional, el crecimiento del empleo y la promoción de un cambio radical a partir de un país pensado para todos.
Bajo esos lineamientos, el país se recuperó fuertemente y la economía creció durante 5 años a porcentajes que oscilaron entre el 7,5 y el 9 por ciento. Creció el empleo formal, el poder adquisitivo del salario y aunque mucho falta por hacer en el campo social, cierto es que estamos en otra Argentina.


CUIDAR EL MODELO. PROFUNDIZAR EL RUMBO


Los trabajadores no podemos dejarnos confundir por aquellos que pretenden retrotraernos a épocas nefastas.
La CGT, lejos de ser ignorada como antes había ocurrido, pudo ser partícipe al momento de tomarse decisiones. Hoy más que nunca debemos velar por la unidad del movimiento obrero y por sobre todas las cosas poner a resguardo a nuestra Central de los ataques para atomizarla, que desde adentro y fuera del movimiento obrero, ya han dejado de ser solapados.
Debemos ser conscientes que las organizaciones empresariales se están rearmando para constituir un núcleo duro de poder. Ya hemos vivido esta situación y conocemos, por haberlos padecido, los efectos de esas maniobras ahora pergeñadas por quienes gozaron de las mieles de los 90.
De igual modo, debemos tener presente que en lo político y económico se está estructurando un gran frente opositor a los lineamientos nacionales y populares que por inmensa mayoría fueron votados dos años atrás. No debemos permitir que ahora nos quieran imponer sus propuestas aquellos que fueron rechazados en las urnas.


El gremio gráfico, esclarecido sobre estas importantes cuestiones, hoy más que nunca debe estar comprometido con la defensa de este modelo y trabajar por su profundización.
Luchando para que en la Argentina la Justicia Social sea una realidad; para que seamos económicamente libres y políticamente soberanos.


Bialet Massé (Córdoba), 6 de agosto de 2009

CONSEJO DIRECTIVO NACIONAL
Y
PLENARIO DE SECRETARIOS GENERALES
DE LA FATIDA


42º CONGRESO ORDINARIO DE LA
FATIDA

El mismo se desarrollo normalmente y conto con la presidencia de la compañera Ilda Bustos de la filia Córdoba. Las comisiones de Estatutos y Memoria y Balance luego de un amplio informe por los miembros del Consejo Directivo de la FATIDA, emitieron sus dictamenes, los que fueron aprobados por los congresales.

Finalmente cerro el congreso luego de las palabras de la presidenta del mismo, el compañero Enrique Marano, quien felicito la numerosa y amplia presencia de las filiales, destacando que solo una filial de las dos ausentes no dio aviso.

Es de resaltar la confraternidad y cordialidad imperante entre los compañeros y compañeras presentes, quienes en todo momento se mostraron interesados en los tratamientos tanto del Plenario como del Congreso y que tuvo su punto culmine en la cena especial del día jueves en donde se brindó por los 68 años de vida de la FATIDA cumplidos el mes pasado y se pudo deleitar con las canciones de un grupo folklórico que amenizo la velada y el aporte músical del compalero Wily Martinez de Formosa y de Rodolfo Flores Peñaranda de Salta.

Durante la cena los compañeros de la Unión Gráfica Cordobesa, entregaron una plaqueta a la FATIDA por sus 68 años de vida, la misma fue recibida por el compañero Enrique Marano