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viernes, 7 de marzo de 2008

QUE NO NOS CONFUNDAN

A LAS FILIALES DE FATIDA,
A LOS COMPAÑEROS GRAFICOS DE LA
RIOJA

A raíz de una nota que desde el Sindicato Gráfico de La Rioja enviaran vía correo electrónico a la FATIDA y sus filiales, fijando una “posición institucional” firmada por 15 compañeros, en nombre de todos los trabajadores gráficos de La Rioja, la Agrupación Gráfica Nacional 7 de Mayo, se dirige a ustedes con el propósito de señalar y aclarar algunas cuestiones, para evitar ser confundidos por personajes que saben que su final esta cerca.
Al contratar en forma directa el servicio con el Colegio Médico de La Rioja, se GARANTIZA la salud de los trabajadores gráficos de La Rioja y sus familias, que es lo que más nos importa. Lamentablemente, se debió tomar esta decisión, ya que desde allí se pretendía usar a los afiliados como rehenes de un problema institucional.
Llama la atención la descalificación al servicio asistencial, porque es el mismo que Rubén Díaz, ex Presidente de OSPIDA, había firmado con la misma entidad, con vigencia hasta junio de este año ¿A qué se refieren cuando dicen que la dirigencia nacional “vendió y entregó” nuestra obra social sindical a manos de nuestro enemigo? Para Ocaranza y sus allegados: ¿ahora es “enemigo” y antes no? Seamos serios.
Este convenio ha sido sustituido y notoriamente mejorado, incluyendo a cargo de la OSPIDA el costo de los medicamentos, odontología, bioquímicos y alta complejidad. Tampoco deben abonar coseguro alguno, con lo cual estas mejoras se transforman en un alivio económico para todos los afiliados. Entonces cabe preguntarse: ¿dónde está el perjuicio?
¿O acaso el “perjuicio” ocasionado es para algunos irresponsables que no pueden manejar ninguna “caja” a su antojo? ¿O quizás es porque ahora no pueden digitar a quién le dan servicios médicos, utilizando su poder con el concepto “clientelar”, discrecionalmente, y dando a entender que “hacían favores” en vez de gestionar el ejercicio del derecho a la salud para todos los compañeros? Y si alguna duda queda aún, sería bueno que preguntemos a los compañeros de Salta, Mendoza, La Plata, San Luis, Santa Fe, por citar pocos casos, cuáles eran los métodos de Rubén Díaz cuando estuvo al frente de la OSPIDA.
Por decisión de los cuerpos orgánicos de la FATIDA y de quienes la dirigen, esto se terminó, cerrando un vergonzoso capítulo en la historia de nuestras organizaciones.
¿Cómo pueden acusar ahora aquellos que durante el ejercicio de sus mandatos, hicieron despedir compañeros de las empresas simplemente porque “molestaban” al sindicato? ¿Qué autoridad sindical y moral tienen algunos de los firmantes de esa nota con los antecedentes que hemos relatado?
No es posible aceptar ninguna acusación de parte de quienes han promovido el despido de compañeros de algunas empresas, simplemente porque “molestaban” a algunos dirigentes del sindicato.
¿Qué pueden decir personajes como Luis Ocaranza (el “López Rega” de Rubén Díaz, que por otra parte sigue escondido, sin dar la cara) respecto de que nuestros representantes “priorizan intereses políticos y personales”? ¿Acaso suponen que tenemos mala memoria? Todos recordamos cuando en los congresos de la década pasada, en pleno auge del neoliberalismo, Ocaranza y Díaz defendían el modelo de entrega del patrimonio nacional y el ataque al movimiento sindical que encarnó el menemismo, mientras FATIDA a nivel nacional fundaba y participaba del Movimiento de Trabajadores Argentinos, unos de los pocos sectores sociales que se opusieron firmemente a la entrega neoliberal.
Créase o no, el primero de ellos, Ocaranza, llegó a declarar ante un escribano en Bahía Blanca (adonde tuvo que irse en busca de “asilo político” por las macanas hechas en La Rioja) que Rubén Díaz fue “víctima de una maniobra política porque la mayoría de las filiales iban a apoyarlo para llegar a la Secretaría General de la FATIDA”…
Al día de hoy, excepto La Rioja, todas las filiales han desmentido esta absurda afirmación, que solo puede ser pergeñada en la mente de un par de delirantes que saben que les queda poco hilo en el carretel, que saben que la mentira, el engaño, los negociados y los aprietes se terminan.
Compañeros: los mentores de este conflicto están allí. Pretenden manipular con mentiras. Como las que decía R. Díaz cuando estuvo al frente de la OSPIDA. Como las que decía Ocaranza, en Plenarios y Congresos. Como cuando pregonaban defender a los compañeros y sucede que los “marcaban” para ser despedidos, garantizando a las empresas que el sindicato no los defendería.
Seguramente las cosas van a ponerse en su lugar. Con dirigentes honestos y serios de verdad que en La Rioja los hay, responsables y comprometidos con los trabajadores y no con las empresas, que no en vano compraban esos “favores” hechos por algunos dirigentes del sindicato con jugosas “donaciones”.
Nuestra historia como organización sindical no admite que permanezcan impunes quienes han pretendido avasallarla con sus inconductas.

AGRUPACION GRAFICA NACIONAL
7 DE MAYO